Son arruguitas muy finas que tienen un sentido horizontal y que se encuentran en el contorno de los ojos, zona que primero pierde la elasticidad.
Uno de los causantes de estas arrugas es el sol. El mismo es el encargado de destruir el colágeno y resecar la piel. Cuando esta última está muy seca se vuelve propensa a tener más patas de gallo.
Cuando nos exponemos a una luz fuerte se suele acelerar el proceso de aparición de patas de gallo. Esto nos obliga, de cierta forma, a mantener los ojos entreabiertos. Lo mismo pasa en zonas donde se concentra el humo. Ni que decir si eres fumador, las patas de gallo no tardarán en aparecer.
Otro de los factores que influyen es la edad. Con los años nuestro organismo deja de producir colágeno y la piel se vuelve menos elástica.
A continuación, te daremos algunos consejos para que tengas en cuenta a la hora de prevenir la aparición de las patas de gallo.
Siempre es aconsejable que uses protector solar, así evitarás la exposición directa de la piel dentro de las horas centrales de sol. Lo ideal es aplicarlo en el párpado superior y en el inferior. Debes renovar la aplicación cada dos o tres horas, y debes colocártelo tanto en el verano como en el invierno.
Si no tenemos otra alternativa de exponernos al sol debemos cuidarnos usando gafas pero de buena calidad.
Tampoco es bueno que nos expongamos al humo de cigarrillos o a sitios cerrados donde hay muchos fumadores. Esto acelera la sequedad de la piel y la aparición de patas de gallo.
Es importante que mantengas una buena hidratación con alguna crema específica. Aplícala en el contorno de los ojos y date masajes en pequeños círculos para acelerar la absorción.
¿Y tú?, ¿conoces algún otro tratamiento o remedio casero para combatir las antiestéticas patas de gallo?, ¿has intentado eliminarlas o tampoco das demasiada importancia a su aparición?, comparte tu experiencia en este espacio enviándonos un comentario al final de este artículo. Tu opinión cuenta.
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