-No fumes, porque la piel envejece prematuramente y pierde su elasticidad, lo que hace que sea más difícil que retenga la humedad.
-Bebe mucha agua y come alimentos saludables ricos en antioxidantes; es el primer paso para hidratar tu piel y darle al cuerpo lo que necesita para repararse a sí mismo.


-Usa un humidificador mientras duermes, ya que puede ayudar a dar a la piel seca y evitar que tu piel se reseque durante todo el día.
-Utiliza protector solar todos los días, ya que la exposición solar envejece la piel y crea más arrugas, manchas de decoloración y de la edad; adquirirá un brillo especial, al estar más hidratada.
-Elige productos hidratantes de calidad y cremas hidratantes que ayuden a restablecer la piel y mantenerla en buenas condiciones, como aquellas que contengan vitaminas del grupo B, que mantengan la elasticidad y promuevan la renovación celular; así como aquellas que crean barreras contra la humedad.
Realmente no hay solución mágica para el envejecimiento de la piel, y para poseer la eterna juventud, pero procura elegir el producto que mejor se adapte a tu piel y que te ayude a mantener la piel hidratada y que ayude a protegerte de los rayos del sol.
Es importante que lleves una alimentación sana, donde cobren especial importancia los antioxidantes, como la vitaminas: provitamina A, C y E y minerales como el el selenio, zinc y cobre, y bebe al menos dos litros de agua a diario, para mantener tu piel elástica e hidratada.
Fuente Imagen ThinkStock.