Aunque siempre dicen que tener una piel grasa es ideal para no tener arrugas pronto, lo cierto es que este tipo de piel es muy propensa a las espinillas, los poros, etc. El uso de mascarillas astringentes te ayudará a luchar contra la grasa acumulada del rostro, al mismo tiempo que eliminará las incómodas espinillas y granos.
En el mercado, encontrarás productos y mascarillas de este tipo, sin embargo, si las haces tú mismo en casa, podrás disfrutar de ellas invirtiendo menos dinero. Además de que tendrán un resultado muy parecido. Entre las mascarillas que puedes elaborar en casa, está la de mantequilla y avena, la de cacahuete, la de gérmen de trigo y la de pepino y limón, entre otras.
Con este tipo de mascarillas, tu piel será otra después de unos días, pero para ello, debes aplicarla una vez al día, al menos. Antes de hacerlo, es muy importante que no olvides limpiar bien el rostro. Esto puedes hacerlo con agua y jabón neutro. Después deberás secarla bien antes de aplicar la mascarilla.
A la hora de aplicarla, una vez tengas la piel bien limpia y seca, deberás tener mucho cuidado con no hacerlo cerca de los ojos. Por último, cuando quieras retirar la mascarilla después de unos treinta minutos aproximadamente, deberás aplicar abundante agua, hasta asegurarte de que no queda ningún resto de producto sobre la piel.
Finalmente, si decides obtener este tipo de mascarillas en una tienda especializada, pregunta para asegurarte de que es buena para tu tipo de piel. ¿Preparado para tener la piel del rostro perfecta?
Fuente Imágenes ThinkStock.
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