

El tratamiento a base de botox es recomendado por prácticamente cualquier dermatólogo y esto es debido a las ventajas que ofrece. En primer lugar, se trata de un tratamiento muy poco invasivo, ya que no requiere ningún tipo de cirugía. Este tratamiento a base de inyecciones se puede llevar a cabo directamente en la consulta del propio médico, por lo que no es necesario pasar por el quirófano y, por lo tanto, llevar a cabo ninguna preparación operatoria. A este respecto siempre debemos asegurarnos de ponernos en manos de auténticos profesionales que cuenten con experiencia acreditada en este tipo de tratamientos como por ejemplo los de la clínica dermatológica Openderma
El botox cuenta con una gran cantidad de ventajas
Otro aspecto que hace del botox un tratamiento de lo más popular, es que se puede aplicar en cualquier época del año. A diferencia de otros tratamientos estéticos en donde debemos tener un especial cuidado con la exposición al sol, el botox se puede realizar en cualquier época, sin importar si hace frío o calor, simplemente cuando lo necesites. A estas ventajas tenemos que sumar también que se trata de una técnica indolora, por lo que si tienes miedo al dolor de las operaciones con el botox no deberías de tenerlo y que los efectos son inmediatos, por lo que no tendrás que esperar ningún periodo para que estos surjan efecto ya que los notarás desde el primer día y sus efectos durarán hasta seis meses. Por último y no por ello menos importante, el botox es un tratamiento seguro que prácticamente no cuenta con contraindicaciones y que apenas produce efectos adversos, por lo que puedes estar tranquila por los temidos efectos secundarios.


Tratamientos que aplican botox
El botox es una solución inmediata para una gran cantidad de problemas estéticos. Gracias a la capacidad que tiene de actuar al instante, habitualmente se recurre al botox para acabar con las líneas de expresión fruto de la edad. Además de para combatir estas líneas de expresión, también es bastante habitual aplicar botox para acabar con el blefaroespasmo, que serían las contracciones intermitentes e involuntarias del ojo y también para tratar la hiperhidrosis, que es el exceso de sudoración excesiva tanto en axilas como en manos y pies. En definitiva, el botox es el aliado perfecto para todas aquellas personas que se quieran sentir más jóvenes y que tengan miedo a pasar por un quirófano. Además, resulta ideal si lo que buscas es que los resultados de tu operación se empiecen a notar desde ya.