

Si quieres recuperar rápidamente la comodidad de tus pies, cuando llegues a casa, deberás aportarles una serie de mimos. En primer lugar, coloca los pies hinchados en agua tibia con sal gruesa durante varios minutos. Éste será el primer paso para conseguir que tus pies descansen y vuelvan a su forma natural.
A continuación, sécalos con una toalla con mucho cuidado y date un masaje con un poco de crema y un chorro de jugo de limón. De esta forma, sentirás una sensación de frescura e irás notándolos menos hinchados.
Otros tratamientos efectivos para la hinchazón de pies se realizan con manzanilla. Puedes preparar una infusión de esta planta y aplicarla dando un masaje cuando se haya enfriado. También puedes dar masajes en tus pies con aceites esenciales. El aceite de oliva también es bueno, puesto que activa tu circulación.
Si hay algo que no puedes olvidar a la hora de cuidar tus pies hinchados, es ponerte una bolsa de hielo sobre ellos. El hielo es el antiinflamatorio más natural que encontrarás, y con él podrás reducir el volumen de tus pies en pocos minutos. Puedes ponerte el hielo mientras descansas en el sofá del salón con los pies en alto. De esta forma, el efecto será mayor.
Por último, jugar con una pelota de tenis debajo de la planta del pie y moverla por el suelo, así como dar paseos sobre superficies suaves, son buenos métodos para reducir la hinchazón. Si notas que ninguno de estos remedios te alivian, entonces te recomendamos que acudas al médico, puesto que la hinchazón puede ser debida por retención de líquidos.
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