

Para ponerle freno y remedio a estas grietas tan incómodas y que, además, afean tus pies, vamos a proponerte una serie de cuidados caseros, para que con ellos, consigas unos talones suaves y perfectos.
¿Has oído alguna vez que la mantequilla es un remedio para los talones agrietados? Prueba a aplicarla después de lavar los pies. A continuación, ponte unos calcetines gruesos y deja actuar durante toda la noche. Verás en pocos días los excelentes resultados. Esto mismo puedes hacerlo con aceite vegetal hidrogenado.
Otro de los remedios caseros que puedes emplear para sanar los talones agrietados es el jugo de limón. Sumerge los pies durante unos 10 minutos en agua con zumo de limón. Puedes hacerlo una vez por semana, sin olvidarte de frotar con un cepillos suaves los talones cuando estén reblandecidos con la mezcla.
El plátano maduro también se puede emplear para conseguir eliminar esas grietas que te han salido en los talones. Tan sólo deberás utilizar la pulpa de esta fruta para colocarla durante 10 minutos sobre la zona afectada. A continuación, deberás lavarte bien los pies con abundante agua para evitar que queden residuos en ellos. Por otro lado, también puedes añadir medio aguacate o pulpa de coco para conseguir una pasta más cremosa. Además, estos alimentos son ricos en varios aceites esenciales y vitaminas liposolubles.
Por último, una limpieza e hidratación diaria, siempre será una buena cura para los talones agrietados o secos. Así que, no te olvides de remojar los pies en agua tibia y jabón durante unos 15 minutos antes de irte a la cama. Puedes hacer una mezcla de vaselina y zumo de limón y frotarla hasta que se absorba, antes de irte a dormir.
Contenidos relacionados
No se ha encontrado ninguno